Dogs unleashed.
Hay cosas, tan simples en esta vida, que pueden hacerte abrir los ojos, ya sea unas palabras, o una canción. Aún no tengo muy claro, si lo hizo para bien o para mal...Cuando terminé de leer, tres días, solo con el anhelo de poder terminarlo, me dejé caer al piso. Un golpe seco. Sentí el dolor en lo más profundo de los huesos, y seguramente, esa parte de mi cadera se pondrá morada. No sé como sentirme al respecto, mi estómago duele un poco, gruñe y se mueve, quiere que lo alimenten. Es extraño, En esa época, cuando no hacía otra cosa más que, controlar el peso, bajarlo, día a día, sintiéndome mal y asqueada hacia mi misma, después de comer algo que según yo no debía, Lejos de eso, me sentía bien. No me sentía como lo hago ahora, esa estupidez me sacaba una sonrisa de la boca, una sonrisa de las más macabras que podría haber hecho. No me sentía feliz del todo, estaba molesta, con mi papá, con mis amigas, con las personas. Las odiaba. Sólo quería desaparecer, no tenía razón alguna para quedarme aquí. Me privaba de la vida, poco a poco, consumiéndome, lentamente.
Aún no consigo un escape, no sé que mierda está mal en mi vida, no sé que es, no puedo arreglarlo. Me desespero, y caigo, caigo, y caigo, cada vez más profundo, no sé de donde agarrarme, no sé, si debería tratar de salir o dejar que me consuma.
Es fantástico e interesante, como un lloriquea por estupideces, por las personas, por no conseguir algo, por que el mundo va en contra tuya.
viernes, febrero 11, 2011 @ 5:53 / 0 daisies
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